¿Cuál es la expectativa de vida para la humanidad hoy?

La expectativa media de vida es un dato que estima cuántos años debería vivir una persona nacida en un año específico. Durante el siglo XX, esta tasa aumentó radicalmente en todo el mundo gracias a avances médicos y tecnológicos, como los antibióticos y el saneamiento básico, pero también se relaciona con los hábitos de las personas. Muchos expertos previeron que este ritmo se mantendría a lo largo de las décadas; después de todo, las innovaciones siguen surgiendo, así como nuevos tratamientos para causas comunes de muerte, como el cáncer.
Los investigadores prevén que el pico de la expectativa de vida será de aproximadamente 87 años: alrededor de 84 años para hombres y 90 para mujeres, una media que algunos países ya están cerca de alcanzar. En Japón, por ejemplo, ya es casi de 85 años. En Brasil, es de 76.4 años, donde invertir más en salud preventiva e innovaciones para retrasar el proceso de envejecimiento puede cambiar este escenario.
Una persona nacida en Brasil en 2023 tenía una expectativa de vida promedio de 76.4 años, un aumento de 11.3 meses respecto al año anterior, superando el nivel previo a la pandemia. Para la población masculina, el aumento fue de 12.4 meses (de 72.1 a 73.1 años). En cambio, para las mujeres, la ganancia fue un poco menor: de 78.8 a 79.7 años (alrededor de 10.5 meses).
Esta información proviene de la Tabla de Mortalidad 2023, publicada recientemente por el IBGE (Instituto Brasileño de Geografía y Estadística), organismo público federal vinculado al Ministerio de Economía de Brasil. Esta tabla presenta las expectativas de vida por edad hasta los 90 años y se utiliza como parámetro para calcular las pensiones del Régimen General de Previsión Social.
El aumento de muertes en Brasil y en el mundo debido a la pandemia de COVID-19 redujo la esperanza de vida al nacer en 2020 y 2021, alcanzando un nivel de 72.8 años en 2021 (69.3 años para hombres y 76.4 años para mujeres). La recuperación de este indicador a partir de 2022 refleja la disminución del exceso de muertes causado por la pandemia para ambos sexos, según Izabel Marri, gerente de Estudios y Análisis de la Dinámica Demográfica del IBGE.
En comparación con 1940, cuando la expectativa de vida era de 45.5 años, ha habido un aumento de 30.9 años: 30.2 para hombres y 31.4 para mujeres.
Expectativa de vida al nacer – Brasil – 1940/2023 (IBGE)
- 1940: Total 45.5 | Hombres 42.9 | Mujeres 48.3
- 2023: Total 76.4 | Hombres 73.1 | Mujeres 79.7
- Variación (1940–2023): Total +30.9 | Hombres +30.2 | Mujeres +31.4
Fuente: IBGE, 2025.
Reducción de la mortalidad infantil y sobremortalidad masculina
En 2023, la probabilidad de que un recién nacido no completara su primer año de vida —es decir, la tasa de mortalidad infantil— fue de 12.5 muertes por cada mil nacimientos (13.5 para hombres y 11.4 para mujeres). En 1940, esta tasa era de 146.6, lo que representa una reducción del 91.5 %.
La mortalidad infantil de menores de cinco años también muestra un avance importante: en 2022 y 2023, por cada mil nacidos vivos, 14.7 no alcanzaron los cinco años. En 1940, esta tasa era de 212.1, lo que implica una reducción del 93.1 %.
En 2023, la sobremortalidad masculina (proporción entre la tasa de mortalidad masculina y femenina) se concentraba en el grupo de adultos jóvenes: 15 a 29 años. En el grupo de 20 a 24 años, un hombre tenía 4.1 veces más probabilidad de no completar los 25 años que una mujer de la misma edad. Este fenómeno se explica, en parte, por causas externas o no naturales (homicidios, suicidios, accidentes viales, ahogamientos, caídas accidentales, etc.), que desde los años 80 comenzaron a tener un fuerte impacto en las tasas de mortalidad de varones jóvenes, especialmente en contextos urbanos.
Hábitos saludables para vivir más
Entre las prácticas más recomendadas para promover la longevidad, destacan:
— Actividad física regular: caminatas diarias de 30 minutos o ejercicios aeróbicos moderados fortalecen el sistema cardiovascular, ayudan a controlar el peso y mejoran el estado de ánimo. También reducen el riesgo de enfermedades crónicas como la diabetes y la hipertensión.
— Alimentación equilibrada: una dieta rica en frutas, verduras, legumbres, granos integrales y proteínas magras provee al cuerpo los nutrientes esenciales. Evitar ultraprocesados, azúcares y grasas saturadas es clave para mantener una buena salud.
— Descanso adecuado: dormir entre siete y nueve horas por noche permite procesos de recuperación celular y regulación hormonal fundamentales para el bienestar.
¿Qué factores contribuyen a una vida larga y saludable?
A menudo, son los pequeños cambios diarios los que fortalecen el cuerpo, mejoran la calidad de vida y elevan las probabilidades de disfrutar de más años con salud. La búsqueda de longevidad pasa por decisiones conscientes y un cuidado constante del cuerpo y la mente.
Posgrado en Gestión Pública y Docencia Universitaria por la Facultad Anhanguera. Tiene especialización en Psicología Social, Grupos Operativos y Psicodrama por la Universidad Popular La Bocca de Argentina, y es funcionario público municipal desde 1987. Es coordinador del Equipo de Articulación con los Consejos Municipales de la Municipalidad de Porto Alegre.



