Si los latinos en Estados Unidos fueran un país, su economía superaría a la de Francia, pero con una ventaja peculiar: su PIB creció un 13 % en un solo año, algo que ninguna nación europea ha logrado en décadas. Así lo revela el 2024 Official LDC U.S. Latino GDP Report del Latino Donor Collaborative, que estima el Producto Interno Bruto (PIB) de esta comunidad en 3.6 billones de dólares en 2022, posicionándola como la quinta economía mundial, por delante de India y Reino Unido. Con proyecciones que, según el mismo informe, podrían situarla sobre Alemania para 2027, los latinos no solo son un motor económico dentro de EE.UU., sino un fenómeno global. Este análisis explora los sectores donde destacan, los países de origen que lideran esta contribución y los niveles educativos que sustentan su ascenso, todo respaldado por datos rigurosos.

Sectores económicos: pilares del impacto latino
La influencia económica de los latinos se afianza en sectores clave que impulsan el crecimiento estadounidense. En manufactura, su aporte es notable: el 2024 Official LDC U.S. Latino GDP Report reporta que en 2022 generaron 457.4 mil millones de dólares, con un crecimiento interanual del 48.4 %. Este auge, según el Latino Donor Collaborative, se debe a su rol en la producción de bienes duraderos y no duraderos, especialmente en regiones industriales como California y Texas, donde su fuerza laboral sostiene las cadenas de suministro.
La construcción también refleja su liderazgo. El Bureau of Labor Statistics estima que los latinos representan cerca del 30 % de los empleos en este sector, desempeñando funciones esenciales en proyectos de infraestructura y desarrollo urbano. Esta participación, según el organismo, se ha intensificado en estados del suroeste ante la creciente urbanización. En servicios—que abarca comercio minorista y hospitalidad—, su presencia ha crecido del 27 % en 2013 a niveles superiores en la última década, conforme indica el Bureau of Labor Statistics. Este sector se fortalece con los 4.7 millones de negocios latinos que, según el Latino Donor Collaborative, generan aproximadamente 800 mil millones de dólares anuales.
Además, el ámbito de la educación, la salud y los servicios sociales muestra un avance significativo. Estudios de universidades californianas, citados en reportes de 2020, señalan que el 8.4 % de la actividad económica latina se vincula a estos campos, evidenciando cómo la mejora educativa abre puertas a roles profesionales más calificados. Estos sectores ilustran una comunidad que combina fuerza laboral con especialización emergente.
Países de origen: diversidad como fortaleza
El impacto económico de los latinos varía según su procedencia, influido por factores demográficos y económicos. Los mexicanos, que constituyen el 58.32 % de los 65 millones de latinos en EE.UU., según Statista (2023), lideran esta contribución. El 2024 Official LDC U.S. Latino GDP Report calcula que en 2022 generaron 2.06 billones de dólares, equivalentes al 57 % del PIB latino total, con un impacto dominante en manufactura, construcción y agricultura, especialmente en estados como Texas y Arizona.
Los puertorriqueños, que representan el 9 % de la población latina según Statista, destacan en servicios y comercio, revitalizando áreas urbanas en Nueva York y Florida. Los cubanoamericanos, concentrados en Florida, sobresalen por su emprendimiento, generando miles de millones en actividades comerciales y profesionales, conforme análisis del Latino Donor Collaborative. Dominicanos y colombianos también aportan de forma notable: los primeros en comercio y manufactura ligera, y los segundos en sectores creativos y tecnológicos, según el Pew Research Center, diversificando el impacto latino.
Educación: capital humano en ascenso
El nivel educativo, determinante para acceder a sectores de alto valor, varía entre los latinos según su origen. El Pew Research Center reporta que los venezolanos lideran con un 54 % de su población en EE.UU. poseyendo títulos universitarios o superiores, destacándose en medicina, ingeniería y tecnología. Los argentinos, con un 45–46 % de universitarios y los mayores ingresos promedio entre los latinos según LatamData, aportan en profesiones especializadas y negocios.
Chilenos (43 %) y colombianos (46 %), según el Pew Research Center, contribuyen en roles técnicos y académicos, mientras que los brasileños comparten tasas similares, enfocándose en tecnología y emprendimiento creativo. En contraste, mexicanos y centroamericanos (Guatemala, Honduras, El Salvador) registran tasas de 6.2 % a 17.5 %, según el mismo centro, debido a barreras históricas en sus países de origen. Sin embargo, su aporte masivo en sectores esenciales compensa esta disparidad.
Retos y oportunidades
El poder de compra de los latinos, estimado en 3.78 billones de dólares por el Latino Donor Collaborative, impulsa el consumo, pero la incertidumbre migratoria plantea desafíos. A pesar del auge económico, persisten desafíos importantes. Según un análisis del Pew Research Center (2023), los negocios latinos enfrentan vulnerabilidades ante entornos políticos restrictivos, particularmente aquellos relacionados con la política migratoria. En contextos donde se han intensificado los operativos o el discurso antimigrante, los pequeños emprendimientos latinos —especialmente en sectores como restaurantes, salones de belleza y comercio minorista— han experimentado caídas en su clientela y dificultades para retener personal, afectando sus ingresos y sostenibilidad.
Sin embargo, las mujeres latinas ofrecen una perspectiva alentadora. El U.S. Latina GDP Report de 2024 estima que en 2021 aportaron 1.3 billones de dólares a la economía estadounidense, con un crecimiento del 50 % en una década. Este avance refleja su creciente liderazgo en emprendimientos, participación laboral y logros educativos, consolidándose como un motor transformador dentro del nuevo paradigma económico del país.
Por lo anterior, más allá de las cifras, el crecimiento económico de la comunidad latina en Estados Unidos es testimonio de una transformación profunda. Millones de personas no solo sostienen sectores clave como la construcción, la manufactura o los servicios, sino que también lideran emprendimientos, desarrollan tecnología y amplían el consumo interno. En un país que avanza hacia un modelo más proteccionista y centrado en el mercado doméstico, los latinos se perfilan como protagonistas insustituibles del nuevo ciclo económico. Reconocer su papel ya no es una cuestión de justicia, sino de visión estratégica.
Consultor y analista data-driven. Egresado de la licenciatura en Ciencias Políticas por la Universidad de Los Andes (Venezuela), del Máster en Gestión Pública de la Universidad Complutense de Madrid (España) y de la Maestría en Política y Gestión Pública del ITESO (México). Fue Director Editorial de la revista Capital Político. Actualmente es Director General de la agencia Politics & Government Consulting y CEO de la revista Eje Global en la ciudad de Miami, Estados Unidos de América.